Suiza con niños: Lucerna, a los pies del Monte Pilatus

Viajar a Lucerna con niños, por su cercanía a Zúrich y su clima más benigno, es un plan inmejorable. El corazón geográfico e histórico de Suiza uno de los destinos más frecuentados por las familias. Bordeando el lago de los Cuatro Cantones encontraremos la mayoría de puntos de interés, sin olvidar su montaña prealpina más insigne: el Monte Pilatus.
Ubicada a la vera del lago de los Cuatros Cantones (Vierwaldstättersee) y custodiada por dos de las montañas prealpinas más icónicas, el Monte Pilatus y el Monte Rigi, Lucerna desprende encanto por todas sus esquinas. Su imagen más icónica, el floreado puente de la Capilla (Kappelbrücke) -el puente de madera cubierto más antiguo de Europa- comunica la ciudad moderna con la ciudad vieja. En un recorrido por sus calles adoquinadas no puede faltar una visita a otro de sus puentes insignes: el Spreuerbrücke, ni a sus preciosas plazas medievales, como la del Vino (Weinmarkt) y la del Grano (Kornmarkt). Parada obligatoria son también el Monumento del León (Löwendenkmal), una emotiva escultura tallada en la roca en 1821 como homenaje a los soldados suizos caídos durante la Revolución Francesa, o la muralla de Musegg, desde donde se obtienen las mejores vistas de la ciudad.



Mención aparte merece el extraordinario Museo Suizo del Transporte, una asombrosa experiencia interactiva que no hay que perderse, muy especialmente si se viaja con niños. Y aprovechar para acercarse al Lido de Lucerna, una de las zonas de baño más populares o al Castillo de Meggenhorn, inspirado en un châteaux del valle francés de Loira, situado junto a un parque infantil y una granja con animales. Pero si excepcional es su entorno urbano, considerado por muchos como el más bello de Suiza, no se queda atrás su entorno natural, con el cercano Monte Pilatus como protagonista indiscutible. En su cima aguarda uno de los panoramas más completos de la región y multitud de actividades para toda la familia.
Suiza en familia
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Qué ver y qué hacer en Lucerna
En el siguiente mapa hemos recopilado algunas de las cosas más interesantes que ver y que hacer en Lucerna y alrededores si viajas con niños (o sin ellos).
Actividades con niños en Lucerna
- Jardín de los Glaciares
Justo al lado del Monumento del León de Lucerna se encuentra el Jardín de los Glaciares (Gletschergarten); un pequeño espacio que a pesar de su tamaño tiene mucho que ofrecer. En su interior emprenderemos un didáctico viaje geológico que se inició hace 300 millones años, cuando Lucerna estaba sumergida bajo un mar tropical, para continuar con las fuerzas tectónicas que dieron origen a los Alpes o las distintas glaciaciones que moldearon las montañas. En el Jardín de los Glaciares descubriremos también marmitas gigantes o conchas fosilizadas, además de un divertido laberinto de espejos, un pequeño museo sobre los fundadores del jardín y un encantador parque alpino. Para hacer la visita más entretenida a los más pequeños se ofrece un juego de pistas (en alemán).

- Museo Suizo del Transporte
Si hay un museo que no deberías perderte si viajas en familia a Suiza, ese es sin lugar a dudas el Museo Suizo del Transporte (Verkehrshaus). Situado a orillas del lago de los Cuatro Cantones, sobre un pequeño delta al este de Lucerna, este enorme complejo museístico es un auténtico paraíso. Separado en sectores dedicados a los diferentes medios de transporte: trenes, funiculares, naves espaciales, bicicletas, automóviles, barcos, aviones… el museo expone todo tipo de vehículos intercalados con multitud de espacios interactivos, simuladores, talleres y zonas de juegos en las que la diversión está garantizada. El amplio espacio exterior, donde los niños pueden coger gratuitamente patinetes y otro tipo de transportes para moverse libremente por él, cuenta además con varias áreas de juegos, todas ellas relacionadas con los transportes. La experiencia se puede completar con las actividades adicionales anexas al museo: un planetario, un cine 3D, un viaje interactivo por el mundo del chocolate o una instalación virtual en la que se recrea un ascenso al Matterhorn (entrada aparte).

- Museo Glasi Hergiswil
Fundado en 1817, la visita al museo de vidrio soplado de Hergiswill es toda una sorpresa. Ubicado junto al lago de los Cuatro Cantones, a medio camino entre Lucerna y Alpnach (punto de partida del tren cremallera que lleva al Monte Pilatus), el museo ofrece varias opciones al visitante entre las que se incluye un pequeño recorrido multimedia en el que se explica la historia del vidrio o un divertidísimo laberinto de cristal (entrada aparte). Además, y de forma gratuita, también se puede observar el trabajo de los sopladores de vidrio o visitar una exposición interactiva repleta de elementos realizados con vidrio, entre los que se incluyen instrumentos musicales. Por si todo esto fuese poco, junto a la fábrica y a orillas del lago, encontraremos unas originales instalaciones que permiten jugar con el agua y un magnífico parque infantil con un gran arenero y una pista de canicas gigantes.

Actividades con niños en el Monte Pilatus
El Monte Pilatus es la excursión más popular y concurrida de Lucerna. Independientemente del modo de transporte elegido, ya sea en tren cremallera o en teleférico, llegaremos a la estación superior de Pilatus Kulm, donde un gran complejo turístico con restaurantes, terrazas de observación y un moderno hotel, nos da la bienvenida. Encontraremos también un pequeño espacio donde se puede jugar con pantallas interactivas (Dragón World). Sin embargo para alcanzar los principales puntos de interés hay que salir al exterior. Aquí nos espera el inicio de los cortos (y habitualmente concurridos) paseos que se dirigen a la senda de los Dragones (Drachenweg), un sencillo camino a través de galerías excavadas en el flanco sur de la montaña, y a los miradores de Esel y de Oberhaupt, ubicados en sendas cotas rocosas en el entorno con magníficas vistas sobre la propia estación, el lago de Lucerna y los Alpes suizos. Antes de continuar el viaje hacia las estaciones inferiores de Fräkmüntegg y Krienseregg, en donde encontraremos diversión para todas las edades, merece la pena, si el día acompaña, tomar el sendero de las Flores (Blumenpfad); una ruta sencilla y muy vistosa en la que con suerte podremos escapar del bullicio habitual de Pilatus Kulm.



CIRCUITO DORADO (Goldene Rundfahrt)
Para alcanzar su punto culminante existen dos opciones: desde Alpnachstad subiendo al tren cremallera más empinado del mundo, con pendientes de hasta el 48%; o desde Kriens, situada a solo 4 km del centro de Lucerna, tomando dos teleféricos. Una de las opciones más popular consiste en combinar ambos trayectos con salida desde la misma Lucerna, tomando en primer lugar un ferry o un tren hasta Alpnachstad para a continuación ascender en tren cremallera por la cara sur y descender en teleférico por la norte. A esta combinación de transportes se le conoce como Circuito Dorado (Goldene Rundfahrt) y se puede adquirir de forma conjunta, entre otros sitios, en la oficina de turismo de Lucerna.
- Senda de las flores (Blumenpfad)
Desde el antiguo hotel de montaña de Pilatus Kulm, anexo al complejo de la estación, se inicia este sencillo recorrido que, por un camino perfectamente acondicionado adosado a los cortados meridionales de la montaña y en compañía de las reinas del lugar, las chovas piquigualdas, avanza hasta llegar al Tomlishorn (2.128 m), el pico más elevado del macizo del Pilatus. Un recorrido sin apenas desnivel en el que además de descubrir algunas de las plantas rupícolas que crecen en este entorno, obtendremos una perfecta visión sobre el recorrido del inclinado tren cremallera que parte de Alpnachstad. Al llegar a la cima, no podremos imaginar un panorama más completo sobre tierras helvéticas, incluyendo tanto gran parte de la meseta suiza como algunas de las montañas más emblemáticas del país.



- Fräkmüntegg
Varios son los motivos por los que incluir una parada en Fräkmüntegg. Situada a 1.412 m aquí encontraremos algunas de las atracciones familiares más divertidas de toda la región de Suiza Central. Empezando por su tobogán alpino, que con 1.350 m de longitud es el más largo de Suiza, o el Dragon Glider, una tirolina guiada con la que es posible experimentar la sensación de volar a través de un bosque. Fräkmüntegg cuenta con uno de los parques de aventuras más grande del país con diferentes niveles de dificultad (a partir de los 4 años). Interesante es también el Wipfelpfad, un sendero de acceso libre que, protegido con redes, permite caminar a unos 10 m sobre el suelo conectando varias plataformas adosadas a los árboles.

- Krienseregg
Si Fräkmüntegg está enfocada a las actividades más adrenalínicas, la estación intermedia de Krienseregg (1.025 m), la segunda parada en nuestro descenso desde el Monte Pilatus hacia la estación de Kriens, está consagrada a los más pequeños. Su original parque infantil, Pilu Land, que toma su nombre de la mascota del lugar, el dragón Pilu, recrea un gran castillo de cuento. Junto al parque hay varias zonas de picnic con parrillas en las que poder poner un sabroso broche a nuestro visita al Monte Pilatus. También desde aquí parte el sendero temático Dragon Moor que con ayuda de un folleto de venta en la estación (disponible en alemán) recorre los bosques y brezales del entorno descubriendo la flora y la fauna del lugar.

Actividades con niños en Bürgenstock
Frontera entre los Alpes y la meseta suiza, Bürgenstock destaca al sur de Lucerna, al otro lado del lago de los Cuatro Cantones. En su loma descansa un enorme complejo turístico al que se llega tomando una combinación de ferry y un pequeño funicular. Sin embargo, su elemento más distintivo es el Hammetschwand, el peculiar ascensor exterior al que se llega a través de una interesante ruta para hacer en Lucerna con niños que recorre los cortados calizos de su cara norte.
- Ruta del cortado (Felsenweg Bürgenstock)
Con inicio en el resort, al que se puede llegar en ferry y funicular o, si vamos en nuestro vehículo, caminando desde el aparcamiento que se encuentra al oeste del complejo, cerca del hotel Villa Honegg, el Felsenweg (ruta del cortado) discurre por un paseo protegido por barandillas junto a un cortado con excepcionales vistas sobre el lago de los Cuatro Cantones. Un camino sencillo en el que con ayuda de varios paneles podremos conocer más sobre la geografía e historia del lugar hasta finalmente llegar al arranque del ascensor. Este tramo, de menos de 2 km, lo podremos realizar incluso con carrito de bebé. Llegados a este punto tendremos la opción de tomar el sorprendente ascensor (abierto de abril a noviembre, menores de 6 años gratis) o, si preferimos ahorrarnos el coste del viaje, continuar ascendiendo por nuestro propio pie los 150 m de desnivel que nos separan de la cima del Bürgenstock. En el punto más alto se ubica un pequeño restaurante y un mirador desde el que se puede disfrutar de un solo vistazo de una buena panorámica sobre Lucerna, el Monte Pilatus o el Monte Rigi.



Alojamiento en Lucerna
Si buscas alojarte en pleno centro de Lucerna, te recomendamos el Boutique Hotel Karl, o los situados al otro lado del río como el Hotel Münzgasse o el Hotel Central Lucerna, todas opciones ideales para recorrer andando los principales lugares de interés. Y si prefieres un lugar cercano a la estación de tren para poder moverte por los alrededores, el Ibis budget Hotel Luzern City es la mejor opción, además te facilitan una tarjeta gratuita para el transporte en la ciudad. Otra opción interesante es buscar un apartamento totalmente equipado, ideal si viajas en familia. El Anstatthotel Horw es una excelente opción al estar situado fuera del centro de Lucerna para mayor comodidad si viajas en coche. Para más opciones puedes buscar aquí.
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